PermitirSe

Realmente que existe el lugar donde no importa qué queremos, sino dónde nos dejamos llevar por lo socialmente exigible y permanecemos aparentemente en un modo ajeno a nuestras decisiones por propia decisión. Pues sí, ese lugar existe y se llama zona de conformidad donde, como bien dice su nombre y denominación, todo se detiene ante un lapsus de silencio mental exigido por la experiencia.

Y es que en este espacio nos conformamos estando en esa zona que conocemos, indistintamente de si es la correcta para nosotros o la aceptamos por miedo, por no arriesgarnos a Decidir qué hacer y por dónde ir!¡!

Llega un momento en que toca salir de ese lugar, hay que ponerle nombre y hacerle cara a la situación que nos invita a crecer, a decidir, a aceptar. Y con la misma, a alcanzar la sanación de un aprendizaje necesario para nuestro camino. Por eso que cuando no se comparten maneras de actuar, de vivir desde el respeto mutuo, hay que posicionarse y reconocer que si apenas las respuestas son concretas, y me pides que los actos sean lícitos cuando menos, llego a preguntarme el motivo de tal exigencia que no tiene siquiera, un ápice de intercambio entre nosotros, un querer saber o un plan conjunto como el que un día, antes de volver, decidieron nuestras almas.

*********
Agradecida
©AsunAdá

Comentarios