Nosotr@s

¿Te reconoces cuando observas tu rostro tras un espejo? ¿Y cuándo observas tu interior, te reconoces?

Hay quien hace caso omiso a tu propia imagen, esencia y presencia, dejando de mirarse de cualquiera de las maneras. Quizás puedas sentir rechazo hacia alguna faceta, complejo de algo, desacuerdo con algo que te ves pero, has parado a pensar en cada una de esas puntualizaciones que alcanzas a descubrir para ver de dónde proceden esas incomodidades.

¿Te has has parado a reflexionar sobre si realmente sea algo efímero, algo que por alguna razón has de cambiar desde tu propio pensamiento o manera de verte? A veces damos más crédito a lo externo que a nuestro propia versión, y nos olvidamos de Amarnos con la errada pretensión de que vengan otros a amarnos. Recuerda que no puedes compartir aquello que no te concedes, aquello que no eres capaz de darte, de percibir en tu interior.


Por eso tan sencillo es el mirarse a los ojos para reconocer que la propia o mirada es la muestra de la felicidad.

Siempre enAmor Agradecida ©AsunAdá


Comentarios