El rumbo de la vida puede ser predecible, aunque generalmente cuando te entregas a ella es sorprendente.
Puedes estar en una terrible tempestad y salir de ella por arte de magia. Tan real y contundente como puede ser a la vez escalofriante.
Hay momentos en que nada se puede hacer más que estar en uno mismo, con la fé puesta en el desenlace al que se llegará sepas o no lo que por medio te traiga y, dejando de hacer a la espera de no crear alguna expectativa.
Puede ser incluso una encrucijada que te lleve a la locura en la frustración y desesperanza, si la confianza te falla.
A ti que pasas por momentos en los que no puedes hacer nada más que ser paciente y amarte para no desesperar.
Siempre enAmor Agradecida ©AsunAdá
Escucha:
Comentarios